Dados los problemas medioambientales cada vez más acuciantes, es necesario mejorar el actual sistema internacional de gobernanza medioambiental para hacer frente a los nuevos retos. El Gobierno aboga por una política de "ahorro de energía, creación de una sociedad que ahorre energía", especialmente para las empresas de fabricación textil. Tenemos que hacer esfuerzos más significativos para promover una dirección de "protección ecológica del medio ambiente" en todas las etapas de la producción.
La tecnología verde se refiere a las tecnologías que pueden ahorrar recursos, prevenir y reducir la contaminación ambiental. Es el núcleo de la gestión ecológica. La tecnología verde puede dividirse en tecnología de tratamiento de final de proceso y tecnología de prevención de la contaminación. La tecnología de tratamiento al final del proceso pretende reducir la contaminación ambiental mediante métodos como la separación, la eliminación, el tratamiento y la incineración, asumiendo el sistema de producción existente. La tecnología de prevención de la contaminación se centra en reducir la contaminación en su origen. La tecnología verde es el principal medio para hacer frente al agotamiento de los recursos y a la contaminación ambiental. Puede beneficiar a las empresas, mejorar su competitividad y desarrollar negocios ecológicos sin sacrificar el entorno ecológico.
El desarrollo sostenible se refiere al desarrollo que satisface las necesidades actuales sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades. También significa mantener, utilizar de forma responsable y mejorar la base de recursos naturales que sustenta la resistencia ecológica y el crecimiento económico. El desarrollo sostenible incorpora consideraciones medioambientales a los planes y políticas de desarrollo sin representar una nueva forma de ayuda condicionada o de ayuda al desarrollo.
El desarrollo sostenible es un nuevo paradigma de desarrollo propuesto en la década de 1980, que responde a los nuevos tiempos y a las necesidades del desarrollo socioeconómico. Tiene en cuenta tanto las necesidades de desarrollo actuales como las futuras, garantizando que el desarrollo no se persigue a expensas de los intereses de las generaciones futuras. También aborda los choques medioambientales imprevistos al tiempo que mantiene una trayectoria de desarrollo.
El consenso internacional sobre el desarrollo sostenible de las empresas hace hincapié en el diálogo continuo entre la gestión de la información, los inversores, los clientes, los defensores del medio ambiente, los proveedores y los empleados, salvando las distancias entre las distintas funciones de la empresa. Esto incluye la gestión financiera, de mercado, de investigación y desarrollo, de la cadena de suministro, de la comunicación normativa, de la reputación y de la marca. Los informes de capacidad de desarrollo sostenible ayudan a los directivos a evaluar sus contribuciones al capital natural, humano y social, reduciendo la variabilidad y la incertidumbre en los precios de las acciones de las empresas que cotizan en bolsa y disminuyendo los costes de capital.
La esencia de una cultura empresarial centrada en las personas es centrarse en la filosofía de gestión y el espíritu corporativo de la empresa, fomentando el compromiso, la motivación y la creatividad de los empleados. Una cultura centrada en las personas requiere que las empresas creen un entorno de crecimiento sostenible para los empleados, equilibrando el desarrollo sostenible de la empresa con el de sus empleados. La formación de los empleados debe alinearse con la cultura corporativa, abordando tanto el desarrollo personal como las normas de trabajo, de la teoría a la práctica, alimentando un sentido de pertenencia y propósito en los empleados. El crecimiento de los empleados dará un fuerte impulso al desarrollo de la empresa, promoviendo un círculo virtuoso de gestión moderna.
La construcción de una cultura corporativa centrada en las personas puede basarse en el desarrollo real de la empresa, formulando visiones de desarrollo a largo plazo y planes estratégicos, estableciendo un objetivo compartido entre la empresa y los empleados, fomentando el sentido de propiedad y aumentando el sentido de pertenencia y responsabilidad de los empleados. Anima a los empleados a trabajar diligentemente por el crecimiento de la empresa. Además, es esencial analizar correctamente la situación y las tareas actuales, guiando a los empleados para que aumenten su conciencia de las crisis, los riesgos, la competencia, las tendencias del mercado y el trabajo en equipo, inspirándoles a ser proactivos y luchar por el éxito. Limitando las propias actuaciones con la cultura y manteniendo una actuación excelente para conservar la imagen del equipo, las empresas pueden lograr una gestión eficaz y sostenible. Así se potenciará el carácter científico de la gestión y se impulsará el desarrollo sostenible de las empresas.
La cultura corporativa limpia es una parte esencial de la cultura corporativa. Fortalecer la construcción de una cultura limpia guía a los empleados a establecer perspectivas correctas sobre la vida y los valores. A través de la influencia, la infiltración y la orientación de la cultura limpia, los empleados abandonan voluntariamente los pensamientos corruptos y las orientaciones de valores malsanos, y se resisten conscientemente a los comportamientos corruptos.
La cultura limpia corporativa es la suma total de teorías limpias, patrones de comportamiento y estilos de vida correspondientes, normas de comportamiento, conocimientos e ideas relacionadas con lo limpio, que sirven como "herramienta afilada de pensamiento" para la construcción de la cultura corporativa. Desempeña un papel insustituible en el desarrollo de la empresa.
Como filosofía de gestión, la cultura corporativa se adhiere al principio de centrarse en las personas, servir al objetivo de la empresa, dar forma al espíritu corporativo y tomar los valores compartidos adoptados por todos los miembros de la empresa como código de conducta. La cultura corporativa aumenta el sentido de pertenencia de los empleados y refuerza la cohesión de la empresa, garantizando su éxito duradero.